Cómo mejorar la usabilidad de tu web

¿Qué es la usabilidad?

Todo proyecto web, especialmente las páginas de empresa o e-commerce que traten de vender sus productos y servicios, deben plantearse desde la experiencia de usuario y la usabilidad web.

La experiencia de usuario consiste, básicamente, en elaborar el diseño de nuestra página web pensando en el usuario final. Cuando hablamos de usabilidad nos referimos al grado de facilidad que perciben los usuarios al utilizar una herramienta o navegar por una web para alcanzar un objetivo. 

Generalmente, este objetivo suele ser encontrar una información concreta o adquirir un producto o servicio, por lo tanto, una web diseñada pensando en la experiencia de usuario será aquella que resulte intuitiva y consiga que el usuario finalice su compra o llegue a la información que busca de manera natural y sencilla.

Las dos reglas de la usabilidad web

Podría decirse que la usabilidad web se fundamenta sobre dos pilares básicos; la eficacia y la rapidez. Tenemos que tratar de que al usuario le cueste el menor tiempo posible lograr el objetivo que perseguía al entrar en nuestra página pero, además, tenemos que procurar que el proceso sea lo más placentero posible. 

Si la web resulta excesivamente aburrida, compleja, desordenada,… es más probable que el usuario se vaya antes de haber satisfecho su necesidad. Es decir, la principal premisa de la usabilidad es ponerle al usuario las cosas lo más sencillas posible. 

¿Por qué es importante pensar en la experiencia de usuario? 

La ingente cantidad de información que hay en internet hace que cada vez naveguemos con más rapidez y descartemos antes aquellas webs que no nos resultan de interés. Que un usuario decida irse antes de tiempo de nuestra web tiene un gran impacto para el negocio, ya que afectará a la tasa de conversión, reducirá la cantidad de leads, empeorará el posicionamiento SEO, y así un largo etcétera. 

Pero además, es complicado diferenciarse en un mercado tan vasto como internet, donde prácticamente todas las webs venden o hablan de lo mismo. Una buena usabilidad ayuda a retener al visitante e impide que vaya a buscar la misma información o el mismo producto en otro site. También ayudará a fidelizar a los usuarios y mejorar la satisfacción de los clientes, con las implicaciones que eso tiene en las ventas o ingresos. 

Lo primero que tienes que saber en cuanto a usabilidad

Para analizar la usabilidad de tu sitio web, lo primero que debes hacer es ponerte en el lugar del usuario, tratar de comprender cómo lo va a percibir y preguntarte si es así como te gustaría que lo interpretara. Si diseñamos nuestra web pensando en cuál será el comportamiento lógico del usuario medio, es difícil equivocarse. 

Aun así, hay determinadas reglas que es conveniente que conozcas, ya que te allanarán el camino para conseguir una web más clara, concisa y sencilla. Toma nota:

• Cuanto más intuitiva y sencilla sea la web, mejor. Trata de ser claro y conciso. El diseño debe ser limpio, con una utilización de los textos, tipografía, imágenes y recursos gráficos que resulte agradable. 
• Las jerarquías son importantes, asegurate de que estructuras de manera correcta y comprensible tu web. Cada apartado debe tener sentido por sí mismo y redirigir a contenidos relacionados que también puedan interesar al usuario. 
• Si quieres que el usuario se dirija hacia determinado sitio, prueba a resaltar este apartado de alguna forma. Pero ojo con pasarse, destacar demasiadas cosas puede producir el efecto contrario y complicar la legibilidad. 
• Evita reiterar contenidos innecesariamente, ya que solo generarán confusión. Quédate sólo con la información más relevante. 
• Al usuario le gusta saber en todo momento dónde está, de dónde viene y a dónde puede ir, así que procura que la web no tenga demasiados niveles de navegación. Un máximo de tres clics es lo recomendable. 

No te olvides de lo más importante

Atento a estas dos últimas recomendaciones, te resultarán imprescindibles para garantizar una experiencia de usuario satisfactoria. 

• Asegúrate de tener un diseño Responsive. Cada vez son más los usuarios que navegan desde dispositivos móviles, por lo que adecuar tu web a teléfonos y tablets es básico en todo proceso de usabilidad. 
• No cometas el error de dar más importancia al diseño que a la funcionalidad. Tener un diseño bonito es importante, por supuesto, pero lo principal es que la web cumpla su función y resulte práctica. Contratar a un diseñador web que realmente comprenda qué es la usabilidad y la experiencia de usuario puede ahorrarte muchas vueltas y quebraderos de cabeza. 

En Talento llevamos 20 años desarrollando portales y páginas web, tanto para administraciones como para empresas. Nuestros proyectos aúnan la parte más creativa del diseño con una estructura de contenidos personalizada que garantiza la usabilidad. Puedes comprobarlo con tus propios ojos en el caso de éxito que te mostramos en nuestra web. Si tienes un proyecto y necesitas un experto, contáctanos.